
El clima de los desiertos es extremoso. Durante el día la temperatura puede rebasar los 40ºC y por la noche desciende tanto esta temperatura que puede helar.
La vegetación es escasa, algunos cactus y arbustos son característicos de esta región. Para vivir en el desierto los animales y las plantas han tenido que adaptarse de diversas maneras al clima.
Las plantas que viven en el desierto son muy distintas de las que crecen en otros lugares. En este ecosistema habitan las plantas anuales y perennes. Las plantas anuales crecen cada año durante la época de lluvias. Esto sucede porque sus semillas permanecen en el suelo hasta que la lluvia las hace florecer. Tres o cuatro días después de haber florecido, las plantas anuales dejan su semilla dormida hasta el siguiente periodo de lluvias.
A pesar de las difíciles condiciones de vida, en los desiertos habitan una gran variedad de animales, entre los que se encuentran serpientes, ratas, conejos, liebres, coyotes, murciélagos y algunos insectos como tarántulas y hormigas.